jueves, 2 de julio de 2015

PERIODISMO CULTURAL Y TECNOLOGÍA


Por ahí me llegó una invitación de Mario Vaquez de Telefonica de Nicaragua para una conferencia de Periodismo cultural y tecnología de Oscar Gómez periodista de El correo de Andalucía. La actividad resultó en perfecta sincronía con el evento del Social Media Day Nicaragua #smdnic donde -entre muchos otros temas- tuvimos un panel sobre social media y comunicación junto a Nestor Arce, Joshy Castillo, Gaby Castro y Yisel Zambrana (por acá una reseña: http://www.confidencial.com.ni/articulo/22151/el-conclave-de-los-nuevos-medios-en-nicaragua )


Allá por el 2011 investigadores de Ericsson ConsumerLab  desarrollaron una encuesta de 18 meses para ver cuántos usuarios chequeaban sus iPhones –y otros smartphones– antes de levantarse. Ésta reveló que el 35% de los usuarios de Android y Apple revisaban sus dispositivos desde la cama. Las aplicaciones que mas consultaban eran aquellas relacionadas a las redes sociales y al microblogging como Facebook y Twitter.

Esto fue el punto de inicio de Oscar para situarnos en el porque el periodismo clásico bien podía considerar el auge de internet y las redes sociales como una amenaza para su status quo -o bajo otra lectura una violenta motivación para el cambio-


Esta nueva realidad de flujos rápidos han impactado la lógica de publicación y divulgación de las noticias: si la gente busca alimentarse de sus newfeeds a primera hora es lógico que las tropas de comunicadores busquen desesperadamente cazar noticias hasta el último segundo previo al despertar de las ciudades. 



Oscar nos decía que él se encuentra actualmente desarrollando un proceso de cambio a lo interno de El correo de Andalucía, cambio que busca responder a las voces digitales de nuestros tiempos, tratando de construir una forma de hacer periodismo y comunicar que se acerque a las nuevas generaciones, partiendo de algunos principios básicos como la necesidad de ofrecer primicias en tiempo real -sin perder de vista la verificación y contraste- desde los entornos digitales de difusión, y desarrollando en papel historias a partir de los datos y noticias, algo así como versiones extendidas y narrativas para el público que aún consume papel.




Obviamente existen otros puntos de vista :) y no podemos tomar las palabras de Oscar como una realidad totalizante, aunque sí pueden dar buenas pistas para hacer nuestras propias exploraciones.



Cuando Oscar dijo eso yo imaginé a muchos amigos y amigas que bien podrían haber empezado a prender sus antorchas y empuñado algún rastrillo. Pero el público presente lo tomó mas bien con curiosidad. Yo sólo pensaba en las veces que he escuchado "periodismo ciudadano" en boca de comunicadores de radio y televisión. ¿No existe?



Aclarado el asunto me acordé de los principales tópicos que tocamos en el panel de comunicadorxs del #smdnic uno de ellos fue precisamente la necesidad que existe de contrastar la información, pero también esa fusión que existe ahora entre fuente y observador. Hoy en día cualquier persona con un smartphone puede registrar y divulgar desde lo que cena todos los días, hasta un atentado terrorista en una playa tunecina.


Eso nos llevó inevitablemente al tema de los y las influencers. Esta oportunidad que nos brinda la tecnología combinada de internet+smartphone+conectividad nos puede llevar a la posibilidad de convertirnos en canales nosotros mismos(as), obviamente apoyados en un desarrollo progresivo de nuestras competencias digitales y una gestión exitosa de nuestra identidad digital.


¿Si estas nuevas tecnologías permiten que prácticamente cualquier ciudadano y ciudadana publique sus registros de la realidad, qué le queda por hacer al(la) periodista? Aquí es donde -de acuerdo a Gómez- entra el periodista y la periodista 2.0 a construir la diferencia desde la edición y la creatividad, agregando el plus a la noticia de la infografía, los mapas, las gráficas, los efectos y la calidad. Yo agregaría que mucha gente puede informar, pero no todos pueden narrar.



Y por supuesto, el tema no es combatir a los ciudadanos y ciudadanas que se mueven por el mundo armados con sus dispositivos de registro, sino más bien incluirles en el proceso de construcción colectiva de la información y la comunicación. 

Buena ideas para construir una realidad distinta entre todos y todas... sigamos tejiendo.


Alberto Sánchez Argüello